Para la campaña se trabajó en reivindicar la palabra rutina. En eliminar el preconcepto negativo que la palabra trae y proponer un doble juego: emocional y funcional, mostrando esas rutinas simples de todos los días, pero tan necesarias para estar bien, y las rutinas indicadas para el cuidado de cada tipo de piel.
La campaña consta de un comercial para TVC y su bajada a medios gráficos y digitales.